Alcoi, 9 de junio de 2013.- Día D + 3 (+69)
Llamándose este blog Memorias de Overlord, no podía dejar pasar esta semana sin hacer alguna referencia a la operación Overlord, nombre en clave del desembarco aliado en las playas de Normandía. Hecho histórico que me fascina, pese a la sangría, la brutalidad y el horror que el Ser Humano puede ser capaz de crear, y que en playas como en la denominada en clave, Omaha, tuvo un especial y aterrador ejemplo. Solamente nos basta con ver los primeros minutos de la película Salvar al soldado Ryan donde re recrea el desembarco de las tropas estadounidenses para hacernos una idea de la atrocidad que vivieron aquellos hombres y las escalofriantes cifras de bajas producidas solamente en esa playa. Más de 2.000 soldados estadounidenses en ocho horas. Estudios realizados en la última década han sacado a la luz que de ese número total, más de la mitad pudieron ser producidas por un solo soldado alemán, Heinrich Severloh.
Llamándose este blog Memorias de Overlord, no podía dejar pasar esta semana sin hacer alguna referencia a la operación Overlord, nombre en clave del desembarco aliado en las playas de Normandía. Hecho histórico que me fascina, pese a la sangría, la brutalidad y el horror que el Ser Humano puede ser capaz de crear, y que en playas como en la denominada en clave, Omaha, tuvo un especial y aterrador ejemplo. Solamente nos basta con ver los primeros minutos de la película Salvar al soldado Ryan donde re recrea el desembarco de las tropas estadounidenses para hacernos una idea de la atrocidad que vivieron aquellos hombres y las escalofriantes cifras de bajas producidas solamente en esa playa. Más de 2.000 soldados estadounidenses en ocho horas. Estudios realizados en la última década han sacado a la luz que de ese número total, más de la mitad pudieron ser producidas por un solo soldado alemán, Heinrich Severloh.
Playa de Omaha, 6:30 horas. 6 de junio de 1944.
Playa de Omaha, 6:30 horas. 6 de junio de 2013. (C) http://www.dday-overlord.com/
Algún día, pasearé por esa playa. Algún día.
Una guerra en la que combatir,
por las últimas banderas, junto a ti.
En el fragor de la batalla,
en lo más crudo del frío invierno,
yo seré tu hermano de sangre
y tu refugio en el infierno.
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